Xalapa, Veracruz., 9 de Mayo de 2019.- Con motivo del reciente deceso del muralista papanteco Teodoro Cano García, el diputado León David Jiménez Reyes emitió un pronunciamiento durante la Segunda Sesión Ordinaria en honor a la memoria del gran artista veracruzano, a manera de un humilde y justo homenaje de la LXV Legislatura.
“El pasado 23 de abril, nuestra entidad perdió a uno de sus más importantes representantes del arte plástico, el maestro Teodoro Cano, fue un hombre excepcional, que hizo de estas expresiones su pasión y vida, su legado pone en alto el nombre de Veracruz”, fueron las palabras de reconocimiento del legislador de Morena.
Afirmó que con la partida física de este célebre personaje, creador de relieves, murales y esculturas queda un vacío difícil de llenar, no solamente a nivel estatal, sino nacional, “su obra ha trascendido fronteras hacia diferentes partes del mundo”.
Jiménez Reyes, también originario de Papantla, recordó que Teodoro Cano se inició como ayudante de sobresalientes muralistas como Diego Rivera y José Chávez, a la par que cursaba sus estudios y la calidad de sus creaciones comenzaba a manifestarse desde las aulas.
Señaló, que fue un destacado promotor de la cultura totonaca, “un verdadero orgullo para quienes nacimos en ese maravilloso Pueblo Mágico”.
En su intervención, el diputado invitó a la ciudadanía que conozcan sus obras como: el monumento “El Volador”, situado en Papantla y con 24 metros de altura; el “Cristo Redentor”, en Tihuatlán con 31.5 metros. Los murales: “Historia de la Medicina”, en el CEM de Xalapa; “La Historia del Movimiento Agrarista”, en la CNC de Xalapa y “La Psicología”, en la antigua Escuela de Psicología de la Universidad Veracruzana.
“Entre sus cuadros más emblemáticos podemos mencionar: Veracruz, Fandango Papanteco, La Peregrinación, Navidad Totonaca y La Inundación de Papantla”.
Abundó, que su obra se une a otros artistas papantecos como Fernando Platas e Imelda Reyes, que han sabido retratar el espíritu de su pueblo y el veracruzano en general.
En este sentido, indicó que se hizo merecedor de innumerables preseas, diplomas y reconocimientos, “pero seguramente el mayor de los premios fue el afecto de la gente, gracias a la sencillez que le caracterizaba”.
Al finalizar, León David Jiménez Reyes solicitó al público asistente un minuto de silencio en su memoria.